Seamos comprensivos: nadie nace enseñado. Todos cometemos errores y, en ocasiones, graves. Para eso estamos aquí, para aprender. Lo real...

2 Comments


Seamos comprensivos: nadie nace enseñado. Todos cometemos errores y, en ocasiones, graves. Para eso estamos aquí, para aprender. Lo realmente grave no es cometer errores, sino no querer reconocer ese mismo error cuando nos lo señalan, ser conscientes de que estamos haciendo algo mal, pero persistir en esa actitud que sabemos errónea porque es cómoda, porque así creemos que molamos más o por cualquier otra excusa. Vamos a repasar aquí algunas de esas actitudes que nos pueden llevar a lo que prevengo en el título, a follar como absolutos cretinos.





“Cuando yo termino, ya ha acabado todo el mundo”.

Si te estás masturbando, desde luego que sí. En el momento en el que estás compartiendo tu intimidad con alguien, abandona esa manera de pensar o será a ti a quien abandonen. El sexo es diversión, amor, o placer para TODOS los que intervienen en él. Ya lo sé, ya sé que cuando alcanzas el clímax te da mucho sueño, da perecita seguir, te apetecen otras cosas… pero verás, el placer del otro es igual, igual de importante que el tuyo, así que ponte a trabajar. 


“Yo quiero que me chupen a mí, pero chupar a los demás me da asquete”.

A todos nos gusta el lado ancho del embudo, sin embargo, el sexo es un juego de reciprocidad. Si no das, no puedes pedir tampoco, ni debes aceptar lo que no estés dispuesto a devolver. Aquí no valen las excusas del tipo “es que yo conozco mi higiene, pero no la de los demás”, si es así, duchaos juntos antes de la función y tenéis unos preliminares estupendos, pero no te acomodes en eso para ser egoísta. Piensa esto: a ti te gusta, ¿verdad? Pues a tu compañero de juegos le gusta tanto o más que a ti, y no es menos que tú en nada para que no le des ese gustito.

Bola extra: aludir al sexismo para dar sin recibir, estilo “es que chupar una polla es normal, pero chupar un coño es muestra de sumisión y es asqueroso-es que chupar una polla es machista, pero el cunnilingus es necesario para que yo me excite”. No. No. NO. A ver, Carlos Luis, si darle placer a la mujer que te lo está dando a ti (y a la que quizá se supone que quieres) te parece asqueroso, humillante o que pone en peligro tu orgullo de macho, quizá deberías revisar tus puntos de vista, porque estás a un paso de decir que el orgasmo femenino no existe y quedarte tan ancho. Luego no te vengas a quejar si las mujeres no quieren ni mirarte a la cara porque, ¿qué comodidad va a darle como pareja alguien que considera su cuerpo como asqueroso y su placer una humillación? En el segundo caso, vamos a ver, Antoñita Mari, machismo es que a una niña le planchen el pecho o le amputen el clítoris; machismo es que a una mujer la responsabilicen de su propia violación; si me apuras, machismo es que la mayor y peor parte de la anticoncepción nos la carguen a nosotras, pero que una mujer decida, libremente y sin coacciones, meterse una polla en la boca -con perdón- no es machismo. Si tú no quieres hacerlo, vale, pero ni lo achaques al machismo, ni pidas después que te lo chupen a ti y te indignes si no lo hacen. Una vez más, no se pide lo que no se da. Es de Primero de Folleteo Básico y también de Primero de Convivencia en sociedad.


“Finjamos que soy tu juguete y tú me lo haces todo”.

Reconozcamos que esto, en ocasiones, puede ser excitante, de acuerdo. No obstante, si tu única manera de tener sexo es “yo me tumbo como un maniquí y que me lo den todo hecho”, no sólo eres más aburrido que una carrera de caracoles, también eres más egoísta que el FMI. Todos estamos cansados. Todos hemos tenido un día agotador, estamos molidos y nos apetece movernos menos que al tipo que inventó el mando a distancia. Todos. Tu pareja también. Si te apetece recibir placer sin esforzarte lo más mínimo, existen los auténticos juguetes sexuales, pero las personas necesitamos reciprocidad. Un amante que siempre está cansado, que sólo sabe hacer la estrella de mar, que nunca quiere preocuparse un poco de cooperar con el otro… no sólo es egoísta y aburrido, también provoca inseguridad en su pareja (“¿No le gusta hacerlo conmigo, no le dejo bien, no le excito…?”). Por favor, las personas no estamos ahí para que nos uses para tu deleite, tenemos necesidades y sentimientos. Respeta a tu compañero y colabora con él.


“Es que tengo ganas y no me importa si tú no//Es que quiero hacer esto que me da mucho morbo y me da igual que tú no quieras”. 

Por favor: NO. Una cosa es seducir al otro, que sepamos a ciencia cierta (porque así nos lo ha dicho nuestro compañero) que le gusta hacerse rogar, y otra muy distinta portarnos como unos babas hasta que se produce la discusión o nuestro compañero accede sin ganas a hacer algo que no quiere hacer sólo para que le dejemos en paz. Relaciones sexuales “por obligación” no conducen nunca a nada bueno. Hacen que el que ha cedido se sienta usado y sucio, mientras que el que consiguió lo que buscaba se vicia a obtenerlo siempre sin preocuparse de lo que pueda o no sentir su compañero. Por favor, si vuestra pareja os dice dos veces que no tiene ganas o que no quiere realizar una práctica determinada, no insistamos. En su lugar, hablemos de ello, averigüemos por qué no está de humor o por qué no desea esa práctica, dejémosle ver que nos interesa como persona y compañero, no sólo -con perdón- como aliviadero. 


“Yo quiero ir directo al grano, los preliminares me aburren”

La diferencia entre sexo sin y con preliminares es la que existe entre comerse un puñado de pipas o un delicioso plato bien cocinado y en su punto. El puñadito de pipas quizá te quite el hambre, pero sin duda el plato bien hecho será mucho más agradable y te dejará saciado por completo. Por otra parte, que tú no quieras preliminares no implica que el resto del mundo tenga que adaptarse a ti. Si tu compañero los necesita sí que debes dárselos porque tu placer no se verá afectado por esperar unos minutos al inicio de la función, pero el suyo sí. Al punto de que el coito puede resultarle doloroso si no se los das, así que lo siento (mentira), pero tienes que ceder. O eso, o buscar siempre parejas sexuales que no precisen juego previo. Por cierto, ¿sabes qué no requiere de preliminares? Una paja. 


De momento lo dejamos aquí, pero para la semana que viene veremos nuevos comportamientos cretinos en la cama. Hasta entonces, ¿se os ocurre alguno? ¡Déjamelo en comentarios! Te prometo que lo trataré la próxima semana. 




You may also like

2 comentarios:

  1. Cisnielco:
    En conclusión. Mataos a pajas si no vais a pensar en el placer de la otra persona. XD

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. ¡Justo! El sexo es para disfrutar en pareja, si uno es incapaz de pensar un poquito en su pareja, mejor que se vaya a xvideos (o que se lea un relato de los míos :D ) y ya está.

      Eliminar